¿Eres de los que al oír la palabra otoño empieza a pensar en las castañas? ¡Y no es para menos! Este fruto es el icono por excelencia de la estación que viste los árboles de marrón y las calles con hojas secas.
Bien es cierto que, aunque las castañas se empiecen a consumir en el otoño, durante el invierno, con el clima más frío, también son muy demandadas. En gran parte se debe a los puestos ambulantes de castañeras y castañeros que se despliegan por las ciudades hasta el comienzo de la primera, pero, sobre todo, se debe a su versátil recetario, sus propiedades y sus beneficios.
PROPIEDADES
Las castañas son ricas en hidratos de carbono de calidad, contienen fibra y un bajo contenido de azúcares. ¡Perfectas para aportar energía al organismo!
Además, su consumo es aconsejable en las dietas tanto de grandes como de pequeños, ya que contienen minerales y vitaminas muy necesarias como, por ejemplo: potasio, magnesio, fósforo, calcio, vitaminas del grupo B y C.
BENEFICIOS
Los beneficios de este fruto para el organismo siempre dependerán de la forma en la que se consuma.
Si optamos por las conservas en almíbar o las recetas de repostería, deben consumirse con moderación, puesto que se multiplican las cantidades de azúcar, las calorías y las grasas que ingerimos.
Por el contrario, si optamos por preparar las castañas cocidas, asadas o tostadas, podremos disfrutar de este manjar en muchas más ocasiones.
Como consejo, independientemente de cómo se consuman, en la medida de lo posible recomendamos hacer una excursión en familia a algún bosque astur y recolectarlas vosotros mismos. ¡Ese momento en plena naturaleza es único!
RECETAS
Te animamos a que durante este otoño e invierno innoves y consumas este sabroso fruto de formas que nunca antes habías probado. ¡Aquí tienes algunos ejemplos!
- Arroz cremoso de cebolla morada, castañas y parmesano.
- Sartén de patatas con setas y castañas.
- Tarta de castañas.
Crema de castañas
Como ejemplo, Mr. Box te ha preparado la receta de una rica crema de castañas. ¿Te apetece empezar por ella? Aquí están los ingredientes para 4 personas:
- 200 g de castañas cocidas o asadas (peladas).
- Una cebolleta pequeña picada.
- Un puerro picado.
- 15 g de mantequilla o aceite de oliva.
- 150 g de patata pelada troceada.
- 5 ml de vinagre de Jerez o manzana.
- 400 ml de caldo de verduras o agua.
- Tomillo seco o fresco al gusto.
- Nata líquida para cocinar al gusto.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Pimienta negra molida.
- Sal.
Ahora que ya tenemos todos los ingredientes podemos comenzar con las elaboraciones:
- Calienta la mantequilla en una cazuela y pocha las verduras con una pizca de sal dejando que se hagan a fuego lento.
- Cuando estén transparentes, añade las castañas con la patata troceada, salpimenta ligeramente y dale unas vueltas.
- Agrega el vinagre, saltea un par de minutos y añade el tomillo.
- Cubre todo con el caldo (o agua) y llévalo a ebullición. Tápalo y déjalo cocer a fuego lento unos 30 minutos removiendo de vez en cuando.
- Cuando las verduras estén tiernas, tritúralo todo añadiendo un chorro de nata líquida al gusto y corrigiendo de sal.
Mmmmm… ¡Se nos hace la boca agua solo de imaginarlo!
Si quieres empezar por una receta más fácil, sencilla y para toda la familia puedes probar con el bizcocho de castañas.
¿Conocías todas estas propiedades de las castañas? ¡Llegó la hora de beneficiarse de ellas y disfrutarlas durante los próximos meses